celulitis

Por muchas cremas que nos podamos poner para eliminar la celulitis, lo único que conseguiremos será difuminarla un poco y tendremos que haber gastado litros y litros de producto antes de lograr cualquier resultado.

Por mucho que no lo queramos ver, la única solución posible para este problema la tenemos en la medicina estética.

Para entender mejor cómo funciona la celulitis, lo primero que debemos saber es que se trata de un tipo de grasa. La grasa es esencial en el organismo, ya que de ahí obtenemos la energía para hacer diferentes acciones.

El problema viene cuando la cantidad de grasa es excesiva. Dependiendo del tipo de grasa, tenemos 3 tipos celulitis:

Tipos de celulitis y el mejor tratamiento

  • Celulitis dura: Es el tipo de celulitis más común en mujeres jóvenes. Se suele localizar en la zona de los muslos y glúteos, tiene textura rugosa y es común que aparezca acompañada con estrías.

Para eliminarla, la técnica más recomendada es la cavitación (que significa utilizar sistema de ultrasonidos de baja frecuencia). Durante este proceso es común utilizar cremas anticelulíticas para que puedan penetrar menor por las ondas del sonido.

  • Celulitis blanda: También conocida como piel de naranja, y es más común en mujeres de más de 35 años. La consistencia es más gelatinosa y flácida. La localizaremos en la zona de los brazos, tripa y espalda.

Hay diferentes tratamientos para eliminarla: desde aquellos invasivos como la liposucción o aquellos no invasivos como la intralipoterapia (se basa en la infiltración de sustancias que hacen que la grasa de deshaga y que el organismo la elimine de manera natural).

  • Celulitis edematosa: Finalmente, este tipo de edematosa es una evolución de la anterior, la de piel de naranja, que también presenta retención de líquidos (es decir, edema). Se presenta normalmente en mujeres de entre 20-40 años.

Se utiliza el tratamiento de drenaje linfático para acabar con la acumulación de líquidos y se combina con un tratamiento de intralipoterapia.

Será crucial acudir al especialista para que determine qué tratamiento es el más recomendado en nuestro caso.

Compartir:

Más entradas